Durante su estancia en la Casona puede aprovechar para visitar la localidad en la que estamos situados, Cuéllar.
El Castillo de los Duques de Alburquerque
El Castillo de la localidad junto a las murallas fue declarado Monumento Artístico Nacional en 1931. Este edificio se sitúa en la zona alta de la villa y se tiene constancia de el, desde el siglo XIV. Aunque la parte mas antigua podría ser del XII. El Castillo tiene planta rectangular con cuatro torreones en las esquinas, tres de ellos circulares. En su interior se abre un patio de columnas que sostienen una doble galería con arcos bajos del siglo XVI. Contiene en su interior diferentes salones decorados con varios estilos.
El castillo se puede visitar con guía.
Murallas y puertas de la villa
El Conjunto Amurallado de Cuéllar es uno de los más importantes de Castilla y León. Está formado por dos recintos, uno superior, más fortificado, y uno inferior, más urbano, ambos con contramuralla. La complejidad y variedad de sus puertas lo convierten en un bien patrimonial de la máxima importancia con una longitud aproximada de 2.000 m. Tuvo en total 12 puertas
Palacios y Casas Nobles
La villa de Cuéllar cuenta con un importante conjunto de casas nobles blasonadas y palacios que se encuentran principalmente dentro del conjunto amurallado. De todos estos monumentos destacaríamos el palacio de D. Pedro I, la Panera y Casa del Duque, el Palacio de Santa Cruz, la Casa de los Daza, la Casa de Los Rojas, la Casa de los Velázquez del Puerco, la Casa de los Velázquez y Ruiz de Herrera y la Carcel Vieja (actual Ayuntamiento de la Villa).
Barrio Judío
La presencia de población hebrea en Cuéllar se documenta desde finales del siglo XIII. La judería estaba situada entre las murallas de la ciudadela y de la villa.
Podremos contemplar muestras de arquitectura popular y monumentos como el Estudio de Gramática (1424) institución por la que pasó el cardenal Francisco Jiménez Cisneros, inquisidor general y Primado de España, el hospital y capilla de santa María Magdalena, la iglesia de san Esteban, que conserva importantes sepulcros de alabastro con bustos exentos, arcosolios con yeserías mudéjares policromadas, en uno de los cuales aparecieron las bulas de Isabel de Zuazo, todas ellas impresas que van desde 1484 a 1539, muchas de ellas incunables, y el parque arqueológico de san Esteban, donde se conservan, junto a los enterramientos, pilas de batanes.